NAVIDAD DE 2000
BELÉN DE TÁBARA
Después de unos años de mucho trabajo, intentando involucrar a más personas en este proyecto, viniendo desde Madrid todos los fines de semana, llega un momento en el que no se puede y se debe de delegar un poco. Esto fue lo que ocurrió para el montaje de la Navidad del año 2000, donde Juanjo su mentor no podía compaginar su vida laboral y familiar con el montaje del Belén.
Es entonces cuando aparecen Carlos y Delfín y se deciden sin una idea clara de lo que quieren hacer y menos de como hacerlo, a montar el Belén para este año. Con unas ideas básicas por parte del maestro se trazan las líneas generales de lo que se pretende hacer y para ser la primera vez que lo hacen con todo su entusiasmo, el Belén de Tábara recibe el segundo premio provincial.
Es entonces cuando aparecen Carlos y Delfín y se deciden sin una idea clara de lo que quieren hacer y menos de como hacerlo, a montar el Belén para este año. Con unas ideas básicas por parte del maestro se trazan las líneas generales de lo que se pretende hacer y para ser la primera vez que lo hacen con todo su entusiasmo, el Belén de Tábara recibe el segundo premio provincial.
Se mantienen y se siguen haciendo los concurso paralelos para involucrar a los tabareses y a las empresas que son las que nos patrocinan.
Dos detalles del montaje del Belén
Los autores de ese año
El número de figuras y de detalles ya tienen un volumen considerable, por lo que se pueden realizar escenificaciones de tamaños sorprendentes.
El número de figuras y de detalles ya tienen un volumen considerable, por lo que se pueden realizar escenificaciones de tamaños sorprendentes.
En esta Navidad del año 2000, la disposición del Belén es de vista frontal, alcanzando los 50 metros cuadrados de superficie, tiene 3 fuentes, río y un pueblo. La imagen de la Anunciación con el reflejo sobre la pared, en este año resulta uno de los detalles que más gusta, además de centrar sobre el, toda la atención a primera vista.